domingo, 6 de mayo de 2018

Tsáchilas recobran vínculo de niños con la naturaleza

La ceremonia del empoderamiento se retoma en la comuna Chigüilpe de la nacionalidad tsáchila. Esta tradición se mantuvo hace siglos entre los tsáchilas y comprendía entregar a la naturaleza los niños que tenían pocos meses de nacidos; era similar a un bautizo que se realiza en el catolicismo.
Sin tener algún tipo de evangelización, cuando los tsáchilas llegaron a la selva de Santo Domingo, en el siglo XIX, realizaban esta ceremonia a sus nuevos integrantes. Preparaban un tronco de madera en forma de cuna para colocar al bebé, al que vestían con todo el atuendo tradicional.
El encargado de realizar la entrega a la naturaleza era el poné o sabio de la comuna, que tenía conocimiento de la medicina ancestral y de la conexión con la tierra, que en tsafiki significa tierra.
“Esto es un empoderamiento, en nuestra costumbre significa que a la edad de 4 meses se entrega el niño a la naturaleza por medio del hombre sabio, que es el poné”, sostuvo Ramón Calazacón, integrante del grupo cultural Tolon Pelé de la comuna Chigüilpe.
Calazacón recreó con su grupo cultural esta costumbre que por años se ha perdido en la nacionalidad, pero que ahora quieren retomarla. Detalló que en la ceremonia se utilizan hojas de ayahuasca –que es la principal planta que emplean los ponés para la sanación, ceremonias y rituales– y de achiote, que es un fruto sagrado para la nacionalidad.
El poné, vestido con su indumentaria ancestral, invoca la energía de la Tierra y entrega al niño, para que a futuro sea un hombre consciente de cuidar la naturaleza. Mientras el sabio pide por la salud del bebé con el fin de que goce de fuerza y conocimiento, el niño durante toda la ceremonia permanece en el tronco de madera.
Un grupo de mujeres también participa del empoderamiento, una vez que el poné terminó con la entrega, ellas danzan alrededor del niño sosteniendo hojas de paja toquilla y ofrecen al dios Pipoa (el sol), granos de achiote y recipientes hechos del fruto del totumo, con beneficios medicinales.
Terminada la ceremonia el bebé es entregado a sus padres y el niño está listo para iniciar las costumbres y tradiciones de los tsáchilas.
Todo este proceso ancestral esté en un proceso de recuperación en la comuna Chigüilpe, Calazacón indicó que recurrió a la memoria colectiva de algunos ancianos para recomponer los pasos que realizaban sus ancestros.
“Esto nos permite mantener nuestras tradiciones y que no se pierdan”, concluyó. (I)

Fuente: https://www.eluniverso.com/noticias/2018/05/04/nota/6742766/tsachilas-recobran-vinculo-ninos-naturaleza

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